No hay nada como amanecer después de una noche de descanso revitalizador, ¿verdad?
Debido al ritmo de vida de la sociedad actual ,no son pocas la personas que sufren de forma regular problemas a la hora de descansar. La calidad del sueño es uno de los factores que más afectan a nuestras vidas, ya no solo porque no afecta al nivel de consciencia o a nuestro humor diario, sino al nivel de productividad en nuestro trabajo o empresa.
Nos pasamos más del 30% de nuestra vida durmiendo y en ocasiones no le damos la importancia que requiere. Tan solo piensa, ¿qué rutinas de descanso has tenido a lo largo de u vida? De manera inconsciente descansamos cuando llega el momento de dormir, pero no dedicamos tiempo a optimizar nuestro descanso. De ahí la importancia de tener una rutina a la hora de irse a la cama.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estimado que el insomnio afecta a alrededor del 40% de la población mundial. Por tanto, a pesar de ser un tema muy relevante que afecta a multitud de personas no es uno de los asuntos de mayor notoriedad dentro de la sociedad.
Por ello, si queremos mejorar la calidad de nuestro descanso, debemos crear una rutina que ayude al cerebro y al cuerpo para que reciban las señales de que llega el momento de dormir.
- Primeramente hay que evitar cualquier tipo de pantalla o cualquier tipo luz azul al menos 1 hora antes de meternos en la cama. Podemos aprovechar esa hora por ejemplo para escribir como fue nuestro día, que objetivos tenemos para mañana, realizar algún tipo de meditación o leer algún libro que nos ayude a relajarnos antes de dormir.
- Por otro lado, es muy importante que el lugar donde descansamos sea fresco con una temperatura de entre 16 a 18 grados Celsius, y a poder ser que incluyan luces rojas o naranjas que emulen el color del atardecer.
🔴 Luces rojas: Son las mejores porque tienen una longitud de onda larga, similar a la luz natural del atardecer, lo que ayuda a relajar el cuerpo.
🟠 Luces naranjas: También son adecuadas, ya que crean un ambiente acogedor y reducen el impacto en el ritmo circadiano.
Aquí te recomendamos unas lámparas con luces cálidas regulables que te ayudarán a bajar el ritmo y preparar tu cuerpo para la noche. - Por último, tener en cuenta que la caída del sol representa de manera natural el momento perfecto para irse a dormir. Nuestro reloj biológico está intrínsecamente conectado con la salida y puesta de sol, por ello y aunque sea algo utópico en la sociedad actual, el atardecer es el mejor momento para descansar.
Éstos son algunos trucos que pueden ayudarte para tener un descanso de mayor calidad. Como puedes ver, y volviendo al inicio de este tema, te reitero la pregunta:
¿Hasta qué punto influye el descanso en nuestra vida?
Influye mucho más de lo que creemos. El descanso no es solo una pausa: es un proceso vital que recarga nuestra mente, equilibra nuestras emociones y regenera nuestro cuerpo.
Dormir bien mejora la memoria, refuerza el sistema inmunológico y nos hace más productivos y creativos. En cambio, la falta de descanso afecta el ánimo, la concentración y la salud a largo plazo.
No es un lujo, es una necesidad.
Descansar bien es vivir mejor.
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